12.1.06

El juego de las diferencias


Desde que estoy viviendo media semana en Madrid y la otra media en Barcelona, hace ya un cierto tiempo, me he negado siempre a establecer comparaciones entre una ciudad y otra, puesto que considero que son completamente distintas. Ninguna es ni más, ni menos, sino distintas, diferentes.

Pero diferencias, haberlas, haylas. Por ejemplo, para los irredentos usuarios del transporte público colectivo, resulta llamativo el distinto sentido de circulación de los trenes en el Metro, por la derecha en Barcelona y por la izquierda en Madrid; o el distinto torniquete que hay que usar para acceder al Metro luego de introducir el billete.

Pero hay una diferencia que siempre me ha llamado poderosamente la atención, y a la que no sé si atribuir valor de ejemplo de un supuesto carácter colectivo. Me refiero al letrero que en determinadas líneas de ambos Metros se ilumina para indicar que el tren ya llega. En una ciudad dice "VA A EFECTUAR SU ENTRADA EN LA ESTACIÓN" y en la otra dice "ENTRA".

El juego consiste en adivinar a que ciudad corresponde cada uno de los avisos.