14.5.06

Dolor en Gaza


"Ni trabajo ni dinero, poca comida, cloacas al aire libre, enfermedad, depresión, esperanza demasiado pequeña, barracas demasiado primitivas, servicios demasiado malos, muerte demasiado temprano, el horizonte demasiado vacío, un futuro peor que no ayuda a un presente insoportable."

Así describe la situación en Gaza el periódico israelí Haaretz, que explica además la reducción a dos sesiones de diálisis por semana a que se ha visto obligado el Hospital de Shifa, con la consecuencia de la muerte de cuatro enfermos renales; y la supresión de tratamientos de quimioterapia; y la reducción del stock de medicamentos en la farmacia hospitalaria a la cantidad apenas suficiente para dos semanas.

Por esas razones, entre otras, la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Louise Arbour, recordó ayer que "Como potencia ocupante, Israel tiene la responsabilidad, de acuerdo con el derecho internacional humanitario, y en especial la IV Convención de Ginebra de 1949, de asegurar el bienestar de la población palestina en los Territorios Ocupados." Debemos recordar que la retirada unilateral del ejército israelí del interior de la franja de Gaza no pone fin jurídicamente a la ocupación, ni a los deberes de la potencia ocupante.

Si todos sabemos cual es la situación, si sabemos que es debida al bloqueo económico, estamos obligados a poner fin al mismo, más allá de los buenos, pero limitados, pasos dados por el Cuarteto la semana pasada.

El dolor, el hambre, la muerte no pueden esperar.